Teoría de la inteligencia emocional de Daniel Goleman
El término inteligencia Emocional se refiere a la capacidad humana de sentir, entender, controlar y modificar estado emocionales en uno mismo y en los demás. Inteligencia emocional no es ahogar las emociones, sino dirigirlas y equilibrarlas.
El concepto de Inteligencia Emocional tiene como precursor al concepto de Inteligencia Social del psicólogo Edgard Thorndike (1920) quien la definió como “la habilidad para comprender y dirigir a los hombre y mujeres, muchachos y muchachas, y actuar sabiamente en las relaciones humanas”
Para Thorndike, además de la inteligencia social, existen también otros dos tipos de inteligencia: la abstracta –habilidad para manejar ideas- y la mecánica – habilidad para entender y manejar objetos.
Un ilustre antecedente cercano de la inteligencia emocional lo constituye la teoría de las inteligencias múltiples del Dr. Howard Gardner. Esta teoría introdujo dos tipos de inteligencia muy relacionadas con la competencia social, y emocional: la inteligencia interpersonal y la inteligencia intrapersonal.
En 1990, dos psicólogos norteamericanos, el Dr. Meter Salovey y el Dr. John Mayer, acuñaron un término cuya fama futura era difícil de imaginar. Ese término es “inteligencia emocional”. Hoy, a casi diez años de esa presentación en sociedad, pocas personas de los ambientes culturales, académicos o empresariales ignoran el término o su significado. Esto se debe, fundamentalmente, al trabajo de Daniel Goleman, investigador y periodista del New York Times, quien llevó el tema al centro de la atención en todo el mundo, a través de su obra “La Inteligencia Emocional” (1995). El nuevo concepto, investigado a fondo en esta obra y en otras que se sucedieron con vertiginosa rapidez, irrumpe con inusitado vigor y hace tambalear las categorías establecidas a propósito de interpretar la conducta humana que durante siglos se han dedicado a desentrañarla: llámese Psicología, Educación, Sociología, Antropología u otras.
Inteligencia Interpersonal
“En el fondo, son las relaciones con las personas lo que da valor a la vida”
Guillermo Von Humbolt
Es la capacidad para reconocer las emociones y sentimiento de los demás, predecir su comportamiento y m mantener relaciones satisfactorias.
Sirve para disfrutar de las relaciones con familiares y amigos, para trabajar en equipo y resultar atractivo ante los demás, también involucra la habilidad de solucionar conflictos interpersonales de manera eficaz.
La inteligencia interpersonal supone una serie de componentes, estos son:
· Empatía: Es la capacidad para ponerse en el lugar de otra persona viviendo sus emociones como si fuesen propias.
· Liderazgo: Es la habilidad para tomar decisiones que afectan a un grupo de personas y que sean asumidas y respetadas por el grupo.
· Habilidades sociales: Involucra la escucha, el respeto, la selección de temas adecuados de diálogo, la asertividad. Estos son elementos fundamentales para el desarrollo de esta inteligencia.
· Apertura: Es la capacidad para comprender el pensamiento de otra persona, dejando momentáneamente de lado, las propias convicciones.
“La inteligencia interpersonal se construye a partir de una capacidad nuclear para sentir distinciones entre los demás: en particular, contrastes en sus estados de ánimo, temperamentos, motivaciones e intenciones. En formas más avanzadas, esta inteligencia permite a un adulto leer las intenciones y deseos de los demás, aunque se hayan ocultado” Gardner
Inteligencia Intrapersonal
“Si un hombre se encuentra a sí mismo, posee una mansión en donde morará con dignidad todos los días de su vida”
James Michener
La inteligencia intrapersonal se encuentra en personas que poseen una gran posibilidad y facilidad para acceder a su propia vida interior. Se le considera esencial para el autoconocimiento que permita la comprensión de las conductas y formas propias de expresión. Cuenta con las siguientes características:
· Autoconocimiento: Implica ser conocedor y valorar las ideas propias, los dones y las destrezas personales.
· Conocedor de las metas personales.
· Autocontrol: Implica ser hábil en el control de los sentimientos personales y las respuestas emocionales.
· Automotivación: Implica poseer habilidad para regular la actividad mental, el comportamiento y el estrés personal.
“La inteligencia intrapersonal es el conocimiento de los aspectos internos de una persona: El acceso a la propia vida emocional, a la propia gama de sentimientos, la capacidad de efectuar discriminaciones entre las emociones y finalmente ponerles un nombre y recurrir a ellas como un medio de interpretar y orientar la propia conducta” Gardner
Características de la inteligencia emocional
“La aptitud emocional es una meta-habilidad, y determina lo bien que podemos utilizar cualquier otro talento, incluido el intelecto puro”[1]
Principios de la inteligencia emocional:
· Recepción: Cualquier cosa que incorporemos por cualquiera de nuestros sentidos.
· Retención: Corresponde a la memoria, que incluye la capacidad de almacenar y de acceder a la información.
· Análisis. Función que incluye el reconocimiento de pautas y el procesamiento de la información.
· Emisión: Cualquier forma de comunicación o acto creativo, incluso del pensamiento.
· Control: Función requerida a la totalidad de las funciones mentales y físicas.
Estos cinco principios se refuerzan entre si. Por ejemplo, es más fácil recibir datos si uno esta interesado y motivado, y si el proceso de recepción es compatible con las funciones cerebrales. Tras haber recibido la información de manera eficiente, es más fácil retenerla y analizarla. A la inversa, una retención y un análisis eficientes incrementaran nuestra capacidad de recibir información.
De modo similar, el análisis que abarca una disposición compleja de las tareas de procuramiento de información, exige una capacidad para retener (recordar y asociar) aquello que se ha recibido. Es obvio que la calidad de análisis se vera afectada por nuestra capacidad para recibir y retener información.
Estas tres funciones convergen en a cuarta es decir la emisión o expresión ya que mediante el mapa mental, el discurso, el gesto u otros recursos, de aquella que se ha recibido, retenido y analizado.
La quinta categoría la del control, se refiere a la actividad general del cerebro por la cual éste se constituye en “desertor” de todas nuestras funciones mentales y físicas, incluyendo la salud general, actitud y las condiciones ambientales. Esta categoría es de particular importancia porque una mente y un cuerpo sanos son esenciales para que los otros cuatro funciones recibir, retener, analizar y emitir puedan operar en la plenitud de su potencial.
El término inteligencia Emocional se refiere a la capacidad humana de sentir, entender, controlar y modificar estado emocionales en uno mismo y en los demás. Inteligencia emocional no es ahogar las emociones, sino dirigirlas y equilibrarlas.
El concepto de Inteligencia Emocional tiene como precursor al concepto de Inteligencia Social del psicólogo Edgard Thorndike (1920) quien la definió como “la habilidad para comprender y dirigir a los hombre y mujeres, muchachos y muchachas, y actuar sabiamente en las relaciones humanas”
Para Thorndike, además de la inteligencia social, existen también otros dos tipos de inteligencia: la abstracta –habilidad para manejar ideas- y la mecánica – habilidad para entender y manejar objetos.
Un ilustre antecedente cercano de la inteligencia emocional lo constituye la teoría de las inteligencias múltiples del Dr. Howard Gardner. Esta teoría introdujo dos tipos de inteligencia muy relacionadas con la competencia social, y emocional: la inteligencia interpersonal y la inteligencia intrapersonal.
En 1990, dos psicólogos norteamericanos, el Dr. Meter Salovey y el Dr. John Mayer, acuñaron un término cuya fama futura era difícil de imaginar. Ese término es “inteligencia emocional”. Hoy, a casi diez años de esa presentación en sociedad, pocas personas de los ambientes culturales, académicos o empresariales ignoran el término o su significado. Esto se debe, fundamentalmente, al trabajo de Daniel Goleman, investigador y periodista del New York Times, quien llevó el tema al centro de la atención en todo el mundo, a través de su obra “La Inteligencia Emocional” (1995). El nuevo concepto, investigado a fondo en esta obra y en otras que se sucedieron con vertiginosa rapidez, irrumpe con inusitado vigor y hace tambalear las categorías establecidas a propósito de interpretar la conducta humana que durante siglos se han dedicado a desentrañarla: llámese Psicología, Educación, Sociología, Antropología u otras.
Inteligencia Interpersonal
“En el fondo, son las relaciones con las personas lo que da valor a la vida”
Guillermo Von Humbolt
Es la capacidad para reconocer las emociones y sentimiento de los demás, predecir su comportamiento y m mantener relaciones satisfactorias.
Sirve para disfrutar de las relaciones con familiares y amigos, para trabajar en equipo y resultar atractivo ante los demás, también involucra la habilidad de solucionar conflictos interpersonales de manera eficaz.
La inteligencia interpersonal supone una serie de componentes, estos son:
· Empatía: Es la capacidad para ponerse en el lugar de otra persona viviendo sus emociones como si fuesen propias.
· Liderazgo: Es la habilidad para tomar decisiones que afectan a un grupo de personas y que sean asumidas y respetadas por el grupo.
· Habilidades sociales: Involucra la escucha, el respeto, la selección de temas adecuados de diálogo, la asertividad. Estos son elementos fundamentales para el desarrollo de esta inteligencia.
· Apertura: Es la capacidad para comprender el pensamiento de otra persona, dejando momentáneamente de lado, las propias convicciones.
“La inteligencia interpersonal se construye a partir de una capacidad nuclear para sentir distinciones entre los demás: en particular, contrastes en sus estados de ánimo, temperamentos, motivaciones e intenciones. En formas más avanzadas, esta inteligencia permite a un adulto leer las intenciones y deseos de los demás, aunque se hayan ocultado” Gardner
Inteligencia Intrapersonal
“Si un hombre se encuentra a sí mismo, posee una mansión en donde morará con dignidad todos los días de su vida”
James Michener
La inteligencia intrapersonal se encuentra en personas que poseen una gran posibilidad y facilidad para acceder a su propia vida interior. Se le considera esencial para el autoconocimiento que permita la comprensión de las conductas y formas propias de expresión. Cuenta con las siguientes características:
· Autoconocimiento: Implica ser conocedor y valorar las ideas propias, los dones y las destrezas personales.
· Conocedor de las metas personales.
· Autocontrol: Implica ser hábil en el control de los sentimientos personales y las respuestas emocionales.
· Automotivación: Implica poseer habilidad para regular la actividad mental, el comportamiento y el estrés personal.
“La inteligencia intrapersonal es el conocimiento de los aspectos internos de una persona: El acceso a la propia vida emocional, a la propia gama de sentimientos, la capacidad de efectuar discriminaciones entre las emociones y finalmente ponerles un nombre y recurrir a ellas como un medio de interpretar y orientar la propia conducta” Gardner
Características de la inteligencia emocional
“La aptitud emocional es una meta-habilidad, y determina lo bien que podemos utilizar cualquier otro talento, incluido el intelecto puro”[1]
Principios de la inteligencia emocional:
· Recepción: Cualquier cosa que incorporemos por cualquiera de nuestros sentidos.
· Retención: Corresponde a la memoria, que incluye la capacidad de almacenar y de acceder a la información.
· Análisis. Función que incluye el reconocimiento de pautas y el procesamiento de la información.
· Emisión: Cualquier forma de comunicación o acto creativo, incluso del pensamiento.
· Control: Función requerida a la totalidad de las funciones mentales y físicas.
Estos cinco principios se refuerzan entre si. Por ejemplo, es más fácil recibir datos si uno esta interesado y motivado, y si el proceso de recepción es compatible con las funciones cerebrales. Tras haber recibido la información de manera eficiente, es más fácil retenerla y analizarla. A la inversa, una retención y un análisis eficientes incrementaran nuestra capacidad de recibir información.
De modo similar, el análisis que abarca una disposición compleja de las tareas de procuramiento de información, exige una capacidad para retener (recordar y asociar) aquello que se ha recibido. Es obvio que la calidad de análisis se vera afectada por nuestra capacidad para recibir y retener información.
Estas tres funciones convergen en a cuarta es decir la emisión o expresión ya que mediante el mapa mental, el discurso, el gesto u otros recursos, de aquella que se ha recibido, retenido y analizado.
La quinta categoría la del control, se refiere a la actividad general del cerebro por la cual éste se constituye en “desertor” de todas nuestras funciones mentales y físicas, incluyendo la salud general, actitud y las condiciones ambientales. Esta categoría es de particular importancia porque una mente y un cuerpo sanos son esenciales para que los otros cuatro funciones recibir, retener, analizar y emitir puedan operar en la plenitud de su potencial.
Tomando en cuenta todo esto, la inteligencia emocional se divide en 4 importantes áreas que son:
· Autoconocimiento
Es la capacidad de identificar los propios sentimientos, usándolos para tomar decisiones y resolver problemas, obteniendo satisfacción personal.
· Control de las emociones
Es la habilidad de controlar impulsos, calmar la ansiedad y encauzar la rabia (la cólera, la ira). Muchas veces el hecho de odiar una actitud de una persona acaba confundiéndose con el odio hacia esa persona.
· Empatía
Es la habilidad de ponerse en el lugar del otro entendiendo o percibiendo sus sentimientos e intenciones no verbalizadas.
· Automotivación
Es la capacidad de preservar y conservar un optimismo sereno, incluso en condiciones relativamente adversas. La capacidad de relacionarse bien. La habilidad de lidiar con las reacciones emocionales de otras personas e interactuar con ellas.
Desarrollar la inteligencia emocional
Al igual que todas las inteligencias, la inteligencia emocional debe ser desarrollada, ya que de este modo lograremos individuos con capacidades sociales brillantes.
“La inteligencia emocional incluye el autodominio, el celo y la persistencia, y la capacidad de motivarse uno mismo. Estas habilidades pueden enseñarse a los niños, dándoles así mejores posibilidades de utilizar el potencial intelectual que la lotería genética les haya brindado”[2]
[1] Entrevista a Daniel Goleman en la feria del libro de 1999 en Argentina http/www.inteligencia-emocional.org/
[2] Goleman, Daniel. La inteligencia emocional. Pag. 16
· Autoconocimiento
Es la capacidad de identificar los propios sentimientos, usándolos para tomar decisiones y resolver problemas, obteniendo satisfacción personal.
· Control de las emociones
Es la habilidad de controlar impulsos, calmar la ansiedad y encauzar la rabia (la cólera, la ira). Muchas veces el hecho de odiar una actitud de una persona acaba confundiéndose con el odio hacia esa persona.
· Empatía
Es la habilidad de ponerse en el lugar del otro entendiendo o percibiendo sus sentimientos e intenciones no verbalizadas.
· Automotivación
Es la capacidad de preservar y conservar un optimismo sereno, incluso en condiciones relativamente adversas. La capacidad de relacionarse bien. La habilidad de lidiar con las reacciones emocionales de otras personas e interactuar con ellas.
Desarrollar la inteligencia emocional
Al igual que todas las inteligencias, la inteligencia emocional debe ser desarrollada, ya que de este modo lograremos individuos con capacidades sociales brillantes.
“La inteligencia emocional incluye el autodominio, el celo y la persistencia, y la capacidad de motivarse uno mismo. Estas habilidades pueden enseñarse a los niños, dándoles así mejores posibilidades de utilizar el potencial intelectual que la lotería genética les haya brindado”[2]
[1] Entrevista a Daniel Goleman en la feria del libro de 1999 en Argentina http/www.inteligencia-emocional.org/
[2] Goleman, Daniel. La inteligencia emocional. Pag. 16
No hay comentarios:
Publicar un comentario